¿Cómo nace Entre-Tejiendo Vicálvaro?
En 1999, en Vicálvaro, había una asociación de mujeres llamada Las Tejedoras. Eran una asociación feminista, a la cual yo pertenecía, que estuvo funcionando hasta 2013. Entonces, decidimos continuar con esa labor, pero transformándola. Lo que hicimos fue juntarnos para tejer, juntarnos para compartir.
No estamos constituidas oficialmente, somos libres. Si nos exponemos a pedir subvenciones, tenemos más dependencia. No necesitamos dinero para nada. Cuando lo necesitamos, hacemos alguna labor.
¿En qué consisten los encuentros que organizan el 25 de cada mes en la plaza de las Mujeres?
Se nos ocurrió porque la plaza estaba muy degradada, queríamos darle vida. Hemos sembrado unas flores que recuerdan a las mujeres que han sido asesinadas. El 25 de cada mes, vamos allí, ponemos un lazo por las mujeres que han sido asesinadas ese mes, las nombramos y las recordamos. Y cada 25 de noviembre plantamos flores por las mujeres asesinadas. Es muy duro, pero lo que queremos es no olvidarlas, porque tenemos un problema que hay que resolver, que es la violencia machista.
¿Qué actividades han hecho para conmemorar el 8M este año?
Hemos trabajado con un grupo de hombres en el tema del reparto de los cuidados: cómo están organizados y por qué deben ser igualitarios. Se han puesto unas mesas en las calles para enseñarles qué implica compartir en estos temas.
El día 8 de marzo se programó un desayuno con las vecinas. Puesto que los hombres ya habían recibido esa formación, fueron ellos quienes lo prepararon, bajo el lema “los cuidados hay que hacerlos los 365 días del año”. Con la Universidad [Rey Juan Carlos] hicimos una conferencia sobre la prostitución. Estos serían los tres actos principales de Vicálvaro. Creo que este año ha habido menos participación, seguramente por el coronavirus.
Podríamos haber puesto violencia de género, pero decidimos poner violencia machista, porque en realidad el machismo es el que mata. La gente que hace esto, que quita los carteles, es porque es muy machista. Nosotras vamos a volver a poner ese cartel cuantas veces nos lo quiten.