Equiparado a la Circunnavegación de Magallanes y Elcano, el de Alberto Martos es uno de esos casos en los que la labor española ha sido, y sigue siendo, importante para el desarrollo de la historia de la humanidad. Y es que hace 50 años, cuando millones de personas miraban al hombre pisando la luna por televisión, no se paraban a pensar en el ejército de hombres repartidos por todo el mundo que velaban por la seguridad y el éxito de Aldrin, Armstrong y Collins. Algunos de ellos desde California, pero también desde Canarias y Madrid. El ingeniero de telecomunicaciones Alberto Martos narra con fresco recuerdo esos gloriosos años en los que las misiones espaciales contaron con la imprescindible labor española.