Una convocatoria con la selección española Sub 18 fue el estímulo que necesitó Nicolás Bono para dar un vuelco en su vida, en busca del profesionalismo en el mundo del rugby. Comprometido e incansable como deportista, siempre con una sonrisa, recién llegado a la mayoría de edad, voló a Londres para integrarse en la disciplina del London Scottish, donde, con mucho esfuerzo, se está afianzado dentro del club como un jugador prometedor.