Un 27%, solamente un 27% de los nominados por la Academia fueron mujeres. De igual manera, para presentar la gala, nuevamente, fueron elegidos representantes del género masculino, los humoristas Ernesto Sevilla y Joaquín Reyes.
Estos presentadores por lo menos sí que hicieron alusión en varias ocasiones a lo injusta que es la situación de la mujer en el séptimo arte. Pero no podemos obviar que estas menciones se hicieron con comentarios poco acertados, falsos, innecesarios y añejos, tales como que la inteligencia femenina es superior a la masculina.
Sin embargo, durante la alfombra roja se sucedieron comentarios desafortunados y fuera de lugar como el de Arturo Valls: “Creo que no es una noche para reivindicar, se debería hablar más de cine y de lo que cuesta producir una película, no marear con otros temas”. ¿Cuándo sino las mujeres a las que más se les oye deberían pelear por la igualdad en su trabajo? No hay mejor ocasión que durante un evento dedicado a ello, un evento que ven millones de personas. Si los Oscar se convirtieron en un trampolín, los Goya no debían ser menos.
La Asociación de Mujeres Cineastas y Medios Audiovisuales repartió abanicos rojos con un escrito en el que ponía #MásMujeres a todo aquel que se quiso sumar a la protesta para visualizarla, y lo consiguieron con creces, pues hubo momentos en que el público se teñía de rojo alzando los abanicos al cielo.
Durante el transcurso de la gala diversas mujeres repartieron premios, los recogieron y protagonizaron discursos que por fin lograron una ceremonia feminista. Es el caso Cristina Castaño quien se ofreció a presentar los Goya el año que viene. "¿Para cuando formar una familia? ¿cuáles son tus trucos de belleza?", Pepa Charro realizó estas preguntas, que normalmente soportan ellas, a algunos de los hombres nominados. Y, finalmente, Leticia Dolera, que sin pelos en la lengua felicitó a los presentadores: “Os está quedando una gala muy bonita, un campo de nabos feministas precioso”.
A pesar de los logros alcanzados el sábado por el género femenino, a la mujer todavía le queda un largo camino por recorrer para conseguir estar a la misma altura que el hombre en cuanto a cargos, premios y salarios. Pero no cabe duda de que si siguen pisando tan fuerte esos tacones no se verán tan lejanos.
Grupo 8