El abandono de la Unión Europea por parte de Reino Unido ha creado un conflicto en el continente, y ha influido notablemente en el transcurso y los resultados de las elecciones irlandesas del 8 de febrero. Estamos ante una situación histórica en Irlanda, ya que, por primera vez, un partido de izquierdas ha conseguido derribar a los partidos conservadores de centro y centro derecha.