Tras darse a conocer la sentencia del Tribunal Supremo de declarar ilegal la huelga de Metro llevada a cabo los días 29 y 30 de junio del 2010, Metro de Madrid ha decidido presentar una demanda judicial. El portavoz de la compañía ha declarado que reclamará a los sindicatos un importe de 4,7 millones de euros, todo ello alegando daños y perjuicios por la huelga donde no se llegó a cumplir los servicios mínimos vulnerando la normativa.